Con motivo del fallido atentado del avión a Detroit han saltado todas las alarmas tanto en EEUU como en Europa sobre la seguridad. Pero la manipulación del equipaje de un pasajero que viajaba a Dublín desde Eslovaquia por parte de las autoridades policiales de este último resulta intolerable. No pretendo minimizar el tema de la amenaza terrorista pero si ponerla en su justa dimensión dado que como todo en este mundo siempre tiene un tufillo a negocio, sobre todo si la paranoia y el miedo nos aborda.

Resulta muy llamativo que la mayoría de los comentarios de foreros en los distintos periódicos que se hicieron eco de las noticias están a favor de extremar medidas y controles a riesgo de perder libertades. En buen romance, nos han comido tanto el coco (cabeza) que estamos dispuestos a todo. Las canas me han enseñado que tragar la comida sin una buena masticación no es bueno para la digestión. Es decir, que ya no me trago todo sin más y trato de ver más allá de lo obvio.

Si es cierto que los aviones desde las torres gemelas han sido el objetivo teórico del terrorismo ¿Cómo podemos explicar lo de Londres y Madrid? Si el problema son los líquidos en los aviones porque lo que compro en freeshop puede subirse a bordo ¿Es que los sospechosos somos sólo los pasajeros? ¿Alguien puede asegurar que todo se controla, que los empleados de los aeropuertos no se traen como buen currantes sus ingestas líquidas de su casa? (más baratas que comprarlas en el aeropuerto) Si viajo en AVE tengo control de equipaje pero si lo hago en ferrocarril común no. De hecho, en mis vacaciones fui de Viena a Praga sin ningún tipo de control (salvo el billete en mitad del trayecto) y estoy hablando de documentos y equipaje.

Pero veamos que es lo que se está maquinando: Cámaras espías hasta en los cuartos de baño, cacheos indiscriminados en cualquier momento y lugar, escáneres para poner en evidencia nuestras miserias, manipulación de nuestro equipaje por personal de “seguridad”. Lo próximo será sin duda el control de equipaje en destino y no precisamente con fines aduaneros. Y todo esto cuando este año la UE pensaba suprimir el control sobre líquidos. Sugestivo ¿No?

Se esta tensando demasiado la cuerda y tarde o temprano se romperá. Lamentablemente, en un próximo atentado no van a tener «coartada» con que justificar el acceso al avión del presunto terrorista, entonces la recomendación será que lo mejor será que nadie viaje y viva encerrado en su casa, de esa manera los vuelos serán seguros pues iran vacíos aunque siempre se prodrá sospechar de la tripulación. Es imposible controlar un aeropuerto; si quieren seguridad y que no se pueda introducir nada extraño en una aeronave deberían cachear y/o pasar diariamente por rayos X a todos los empleados del aeródromo. El resto es estrategia de sometimiento, molestias innecesarias y ganas de aterrorizar al ciudadano ¿O tanto exceso busca otra cosa?.

Y esa es la clave pues dentro de la nueva estrategia de dominación esta la sumisión por el terror, creando el clima para en función de los intereses económicos de los que mandan se pueda avasallar el país, región o continente que les convenga. Ahora resulta que la cuna de los radicales es Yemen, cuyo gobierno débil viene siendo soportado por los EEUU desde hace años y por sus costas pasan a diario cientos de petroleros cargados de oro negro. Establecer bases allí resultaría de lo más estratégico para los fines que se les ocurran. Estamos llegando a un punto en que bajo el paraguas de libertad, democracia, estado de derecho, derechos humanos etc. Cualquier cercenamiento de nuestras libertades individuales es justificado. Las libertades individuales están cada vez mas restringidas amparada en una supuesta seguridad que abarca cada vez espacios más amplios. En la práctica, cada vez es mayor el control del «Gran hermano» al punto que ya empieza a asfixiarnos y por supuesto, el negocio de la guerra se va trasladando al de la seguridad y toda la parafernalia asociada. Atención inversores.

Un saludo a todos

THENIGER