John eliot gardiner

 – John Eliot Gardiner con los English Baroque Soloists: Magnífica y cristalina versión — con instrumentos originales — la de Gardiner y sus chicos de la English Baroque Soloists, formación fundada en 1968 y que obtuvo su actual denominación 10 años después. La versión se corresponde con una producción de dicha ópera mozartiana efectuada en el parisino Teatro del Châtelet. Además, Gardiner, una de las mayores personalidades musicales británicas del momento, fundó en 1990 la conocida Orchestre Révolutionnaire et Romantique con la que nos ha brindado versiones de absoluta referencia dentro del panorama compositivo del siglo XIX. En esta versión, inmejorable en cuanto a tempi y dinámica sonora, podemos escuchar a un Mozart muy cercano y ameno, con un desarrollo de la partitura francamente extraordinario. Da gusto ver como los profesores de la orquesta se comprometen totalmente con la partitura y disfrutan con la ejecución. Lo que más me ha llamado la atención es la sensacional línea interpretativa de Gardiner, buscando y encontrando la jovialidad de una pieza musical maravillosa que, pese a su corta duración, está entre las creaciones más geniales de Mozart. A mi juicio, la versión es sobresaliente, destacando la claridad interpretativa y la veracidad en una partitura inolvidable. ¡Bravo, maestro Gardiner!

SimonRattle

Simon Rattle con la Orquesta Filarmónica de Berlín: (Lamentablemente, este vídeo fue suprimido). Versión diametralmente opuesta a la anterior e interpretada por el actual y polémico director titular de la Filarmónica de Berlín, una de las tres mejores orquestas del mundo. La ejecución… Me parece desproporcionada y poco convincente. Observo un cierto desequilibrio general a la hora de abordar la partitura, con unos golpes de timbal que llegan a asustar y que, posiblemente, sean magnificados debido a la deficiente calidad del vídeo del enlace. El segundo tema principal de la obertura resulta un tanto soso y penosamente ralentizado en tempo, aunque Rattle se nos muestre entusiasmado en su concepción gestual. La orquesta, brillantísima, parece no acabar de entender la versión que propone Rattle, muy encasillada en el concepto interpretativo romántico que desvirtúa por completo la partitura. (No acabo de entender el intento del director británico por tratar de interpretar a Mozart a la manera de Beethoven). La recapitulación carece de alegría y frescura, y el crescendo final adolece de una precipitación que considero contraproducente, aumentando la dinámica sonora en apenas un compás y no gradualmente. No me gusta esta versión. Creo, y pido disculpas si mi opinión resulta un tanto polémica, que al maestro Rattle le viene muy grande la Berliner Philharmoniker. Esta prodigiosa orquesta merece otro director titular aunque no olvidemos que fueron los propios profesores de la formación los que eligieron democráticamente a Rattle para el cargo.

 Dean Anderson

Dean Anderson con la Orquesta de Cámara de la Ciudad de Rose: La Rose City Chamber Orchestra fue fundada en 1998 por un grupo de músicos en Portland, Estado de Oregón, EEUU, disconformes con la actividad musical del estado noroccidental norteamericano, mayormente centralizada en la Orquesta Sinfónica de Oregón. Su primer concierto fue dirigido por Tim Hankevich, a la sazón colaborador de la mencionada Orquesta Sinfónica de Oregón y actual director asistente de la Orquesta Sinfónica de Kansas City. La orquesta presenta la particularidad de ser completamente autogestionaria, teniendo todos y cada uno de los profesores su voz y voto para tomar las decisiones que afectan al conjunto. La agrupación carece de director titular y para concierto invita a un director diferente, llegándose a dar la circunstancia de que tocar sin director en algunas actuaciones. Por su parte, Dean Anderson es un emergente director norteamericano cuya formación musical llevó a cabo en la Universidad de Missouri, graduándose en violín y dirección. Ha dirigido numerosas orquestas norteamericanas en calidad de invitado y en la actualidad es el director titular de la Orquesta Sinfónica de Orange County. Es uno de los directores americanos más prometedores del momento, como así se puede apreciar en esta más que correctísima versión de la obertura mozartiana que podemos contemplar en el vídeo del enlace. Obviamente, la calidad de la orquesta deja mucho que desear — las cuerdas gritan — y bastante tiene el joven maestro Anderson con ofrecernos una versión ortodoxa y sin ninguna alegre concesión de cara a la galería. Versión correcta — aunque algo sosa — de un director al que no se le puede pedir más, de momento. Su planteamiento, aún con las lógicas y consecuentes limitaciones, me parece mucho más congruente que el de Rattle. Aprobado alto.

Michael clark

Michael Charles Clark con la Orchestra 1791: En este vídeo podemos escuchar la alegre interpretación de Charles Clark, director australiano que realizó sus estudios musicales en el Conservatorio de Sydney y posteriormente amplió en Londres su formación. Hombre musicalmente polifacético, ha dirigido en países como Bulgaria, República Checa, Polonia y Suiza. Apasionado por la ópera, ha colaborado en algunos teatros alemanes (Bremen y Pforzheim) y ha llegado a ser director musical del Sydney Mozart Players. En esta versión, observamos a un Clark muy poco ortodoxo en sus peculiares formas de dirección — parece que lleva un sable en vez de una batuta — y la grabación tiene mucho de «comercial». Aún así, la ejecución no es censurable y la obertura se desarrolla con limpieza y alegría, aunque con cierto amaneramiento en la resolución del segundo tema. El crescendo final está correctamente edificado y la orquesta suena aceptablemente bien. (De veras, no dejo de sonreír ante los extraños modos de dirección de Clark). Versión para andar por casa y no complicarse la vida.

James levine

 James Levine con la Orquesta del Metropolitan de Nueva York: Primeramente, hemos de aclarar que en el vídeo no se nos ofrece información alguna sobre la orquesta, aunque intuyo que se trata de la Orquesta del Teatro de Ópera del Metropolitan de Nueva York, institución de la que Levine es su director musical desde 1976 en una prolongada trayectoria que resulta francamente admirable. Bajo la dirección de Levine, el Metropolitan se ha convertido en una de las mejores y principales instituciones operísticas del mundo, con una orquesta realmente sensacional. En esta versión, de auténtica categoría, vemos el gran dominio de Levine a la hora de abordar la obertura. La orquesta suena de maravilla — enorme la madera y la cuerda grave — y Levine disfruta como un niño con una ejecución desenfadada y pulcra en la que destacan las admirables y cuidadísimas transiciones entre los distintos temas. Extraordinaria matización y prodigioso crescendo final. Versión de absoluta referencia. ¡Qué bien que se lo pasa Levine dirigiendo esta obra!

 Edo de waart

Edo de Waart con la Orquesta Filarmónica de la Radio Holandesa: (Lamentablemente, este vídeo fue suprimido). Antiguo oboísta de la Royal Concertgebouw Orchestra, Edo de Waart es una de las máximas figuras del panorama musical de los Países Bajos. Ha sido director musical de la Orquesta Sinfónica de San Francisco y principal director de la Orquesta de Minnesota. También fue el director asistente de la Royal Concertgebouw en los tiempos en que dicha formación estuvo tutelada por Bernard Haitink. En la actualidad, Edo de Waart es director artístico de la Orquesta Filarmónica de Hong-Kong y director musical de la Orquesta de Milwaukee, aparte de ser director laureado de la Orquesta Filarmónica de la Radio Holandesa. Por su parte, la Orquesta Filarmónica de la Radio Holandesa fue fundada en 1945 por Albert van Raalte y ha contado con la titularidad de directores como el propio Edo de Waart (1989-2004), Paul van Kempen, Bernard Haitink o Sergiu Comissiona. Su actual director titular es Jaap van Zweden. Después de la prestigiosa Royal Concertgebouw, la Filarmónica es la orquesta holandesa de mayor relieve. En este vídeo nos encontramos con una grandiosa ejecución de la obertura mozartiana, cuidada hasta el último detalle — maravilloso el pianissimo de los primeros compases — y con gran equilibrio de tempi y masas sonoras. La pulcritud, elegancia y seguridad de Edo de Waart se corresponde con un portentoso sonido de la orquesta. Excelente versión.

 

Mariss Jansons con la Orquesta Filarmónica de Viena: (Lamentablemente, este vídeo fue suprimido). ¡Agarrémonos que vienen curvas! La versión se debe a uno de los tradicionales Conciertos de Año Nuevo — concretamente el de 2006 — celebrados en la mítica Musikverein de Viena. He de confesar que soy un declarado entusiasta de Jansons, a mi juicio, uno de los mejores directores de la actualidad. La ejecución que nos ofrece de la obertura mozartiana es valiente, firme y con unos extraordinarios contrastes en lo que a dinámica sonora se refiere. Los tempi son decididamente vivaces y la orquesta suena de escándalo (Es la mejor orquesta del mundo con diferencia). El último tema, antes de la recapitulación, es un prodigio de trazo y delicadeza, difícilmente superable. La conclusión, genialmente matizada, es de manual de dirección. Gran Jansons… Pero, claro, con esta orquesta todo parece más fácil. (¡Qué maderas! ¡Qué cuerda! ¡Qué trompas…!  ¡Demonios! Me he puesto a dirigir con un bolígrafo frente a la pantalla del ordenador…). A pesar de ser una lectura indudablemente romántica considero que la versión es de lujo. La Wiener Philharmoniker es Patrimonio de la Humanidad.

Nikolas Harnoncourt

Nikolaus Harnoncourt con la Orquesta del Festival de Salzburgo: En este vídeo podemos escuchar la obertura mozartiana dentro de una de las sesiones del Festival de Salzburgo de 2006 en las que Harnoncourt interpretó la ópera completa. Que quede claro que el magisterio y la personalidad del maestro Nikolaus Harnoncourt están fuera de cualquier posible duda, aunque, dicho esto, la versión que nos ofrece en este vídeo de la obertura de Mozart me parece inadecuada, sobre todo en lo referente a unos tempi que considero excesivamente lentos. El sonido y la lectura, fuera de este aspecto, parecen impecables pero, en mi opinión, la música de Mozart se me antoja algo sosa en esta ejecución del maestro Harnoncourt. Me encantaría tener una charla con el maestro para que me explicase su decisión de tomar unos tempi tan incontestablemente lentos, razón que en Mozart, hasta donde llega mi conocimiento, no parece muy convincente (Ni Celibidache se atrevió a ralentizar a Mozart de esa manera). Pero, obviamente, el maestro Harnoncourt es una de las máximas autoridades mundiales en el actual panorama musical y sus motivos tendrá para ello. A mí, esta versión, no me gusta en absoluto. Pero, reitero una vez más, que quizás el problema resida en mi más completa ignorancia comparada con la contrastada sabiduría del maestro Harnoncourt.

George Szell con la Orquesta Sinfónica de Chicago: Lo primero que hay que comentar de esta versión es que el sonido, al tratarse de una realización televisiva de estudio, deja mucho que desear si lo comparamos con la acústica de una sala de conciertos. Como no podía ser de otra manera, la lectura es del todo analítica y transparente, limpia a más no poder. Aunque, en mi opinión, echo un tanto de menos una mayor dosis de gracia, sobre todo en la exposición del tercer tema. Magistral el crescendo final, con precisas indicaciones para que todas las secciones orquestales adquieran su protagonismo y no queden sepultadas por la línea melódica principal. Versión de notable alto.