Humillas tus ojos en mi presencia
buscando el cirio de las vanidades,
estela en el matiz de tus verdades,
sonrisa esbozada en concupiscencia.

Trazan tus manos curvas en descenso,
eligiendo el hueco más excitante,
tambor que en tus dedos es penetrante,
vibrantes caricias de ritmo intenso.

Ligas con tu mirada ensombrecida
ardorosos deseos de oscuridad,
brotando en tus labios la iniquidad
al trayecto de tu lengua suicida.

Con los rasgos de tu estirpe amazona
embrujas el huracán envolvente
que protege como escudo candente
al chispero escondido en mi corona.

 

De la colección PÓRTICO DE IMPRESIONES (Diciembre-abril 2007)