La vida de George Gershwin
Durante toda su vida, George Gershwin hubo de sufrir con un prejuicio muy generalizado entre los músicos y el público de las salas de conciertos. ¿Cómo tomar en serio a un fabricante de operetas y de canciones populares? Con ello, el compositor luchó por conferir a los temas de jazz, y a los del folclore local que los inspiraban, las letras de la nobleza que se le negaban. Este esfuerzo de síntesis, llamado actualmente y de manera un tanto despectiva jazz sinfónico, no fue ni mucho menos ilusorio: El propio Ravel respondió al compositor norteamericano que él no tenía nada que enseñarle y que siguiera con su estilo artístico. Pero a ojos de muchos, el hecho de que el jazz — una música considerada inferior por su procedencia afro-americana — pudiera mezclarse con la música clásica era demasiado chocante. El estreno de Rhapsody in Blue en 1924 fue todo un acontecimiento en América, congregándose una multitud que quería escuchar esa «fusión» de estilos. El éxito fue atronador.
A día de hoy existen una serie de malentendidos en lo que respecta a Rhapsody in Blue: No hay un verdadero jazz en la partitura, sino una especie de elegante y concisa yuxtaposición de fórmulas pianísticas nacidas de la música popular americana y de un tratamiento orquestal que rehabilita las variedades. Más que jazz, existen unos trazos que parecen camuflar unos tintes judíos que recuerdan a los cantos de una sinagoga.
Por otro lado, el título de la obra ha dado lugar a erróneas traducciones (Rapsodia triste) por asociar la palabra Blue al blues central de la partitura. Lo cierto es que el título se corresponde a un intento de asociar sonidos y colores a semejanza de los simbolistas, de igual manera que hacía Debussy cuando escribía: Un acorde de novena, bemoles azules… La estética es exactamente igual en este caso. Se debe, pues, traducir el título como Rapsodia en azul. (A diferencia del título de este bar virtual de copas: LEITER´S BLUES=Tristezas de un servidor… Otra cosa: En la Wikipedia, en su versión española, se afirma sobre esta obra TODO LO CONTRARIO a lo aquí expuesto. Escoged la versión que creáis más convincente)
Rhapsody in Blue por George Gershwin
* Escrita para piano y banda de jazz en 1924
* Estrenada el 12 de febrero de 1924 en el Aeolian Hall de Nueva York por la Jazz Band de Paul Witheman y el autor como solista
* Versión orquestal desarrollada por Ferde Grofé en 1946 (Gershwin no sabía orquestar en 1924)
* EFECTIVOS ORQUESTALES: Flauta, óboe, 2 clarinetes, fagot, 3 saxofones (Dos altos y un tenor), 2 trompas, trombón, timbales, batería y sección de cuerda. Casi todos los directores doblan los vientos y, consecuentemente, la sección de cuerda. También se suele añadir un tercer trombón, una tuba y algún instrumento de percusión. Pero la orquestación de Grofé es la reseñada anteriormente.
* Duración aproximada de la ejecución: Entre 16 y 17 minutos
La versión que os dejo en los enlaces al vídeo se corresponde con una interpretación llevada a cabo en los años setenta por Leonard Bernsteim junto a la Orquesta Filarmónica de Nueva York.
DESARROLLO DE LA OBRA
– Rhapsody in Blue (Vídeo primero): La obra, que comienza y termina en Sí bemol mayor, empieza con un inmenso y temido glissando del clarinete por portamiento obligado. El tema, de claro espíritu jazzístico, es desenfadado, casi voluptuoso, un verdadero bordado de corcheas y ornamentos. La orquesta acompaña al clarinete y ambos exponen el tema en tres ocasiones hasta la primera intervención del solista, un largo pasaje de variaciones en forma de cadencia.
A continuación, la orquesta repite el tema de manera impetuosa y alterna con el solista alguna variación sobre el mismo. Se llega a un pequeño clímax para posteriormente enlazar con un segundo tema, danzarín y trepidante, expuesto por la orquesta y rápidamente asumido por el piano.
Viene entonces el segundo episodio solista, acompañado ocasionalmente por algún instrumento de madera o en solo, que realiza una larga reexposición con variaciones de los dos primeros temas. La música languidece paulatinamente hasta dar la orquesta la entrada a un tercer tema (Vídeo segundo), al que muchos asocian con Chaikovski por su melodía amplia, lenta y sugerente (De hecho, la más cercana al blues). Aparecen entonces los pasajes más complicados para el piano en su tercera intervención solista.
Tras una escala ascendente, la orquesta va reintroduciendo todos los elementos melódicos previos ante el juego de filigranas del piano. Seguidamente, una brillante recapitulación preludia el final en tutti con la última afirmación del tema inicial del clarinete. La obra me parece del todo portentosa y original.
VERSIONES RECOMENDADAS
Por esta vez no haré comentarios a las mismas al no sentirme capacitado para emitir un juicio medianamente crítico. Cito las versiones que a mí más me gustan:
– Leonard Bernstein (Director y piano) con la Orquesta Sinfónica Columbia. CBS
– D.D. Jackson y la ProMusica Chamber Orchestra dirigida por Timothy Russell. SUMMIT RECORDS
– André Previn (Director y piano) con la Orquesta Sinfónica de Londres. EMI
– Leonard Bernstein (Director y piano) con la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles. DG
– George Gershwin y la Columbia Jazz Band dirigida por Michael Tilson Thomas. CBS (Interesantísimo montaje)
– Peter Donohoe y la London Sinfonietta dirigida por Sir Simon Rattle. EMI
– George Gershwin y la Paul Witheman Orchestra dirigida obviamente por Paul Witheman. PEARL (Histórico registro de 1928)
– Michel Camilo y la Orquestra Simfónica de Barcelona i Nacional de Catalunya dirigida por Ernest Martínez Izquierdo. TELARC
– Leonard Pennario y la Hollywood Bowl Symphony Orchestra dirigida por Felix Slatkin. EMI
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Pobre Previn… el dinero que habrá perdido en divorcios!
Es una versión buena, pero para ser sincero, la primera parte me aburrió un poco. Efectivamente Previn ejecuta desenfadadamente… quizá demasiado: es que si bien no es jazz, pero tampoco puro «clásico», habría que ponerle un poco de ritmo a la cosa (hablando en criollo).
Más allá de mi preferencia por Lenny, su versión con la Columbia Symphony de 1959 probablemente sea la definitiva y creo la más apabullante de todas las que grabó él (sí, puede resultar odioso decir en voz alta lo de las versiones definitivas, pero todos sabemos que en el fondo…).
De todos modos siempre es bueno ver otras versiones… ay, de Previn tengo que escuchar más cosas: tenés algo a mano para recomendar?
un abrazo, Leiter
No voy a saber opinar de versiones…pero en sí la pieza me encanta! Me la voy a poner de fondo para seguir escuchándola. Ando liadilla, leiter, y aún encima un duende se dedica acortar la luz de mi casa (y la conexión a intenet).
Besos
Me ha encantado tu explicación del título… Parece mentira, parece que está todo claro y de pronto ves las cosas con una luz diferente. Gracias, Leiter.
De Previn, amigo Frank, te recomiendo encarecidamente su integral de las sinfonías de Rachmaninov — sé que a ti te tira ese compositor — grabadas con la Royal Philharmonic (TELDEC). Excelentes. Existe una versión en YOUTUBE de la Rhapsody por Bernstein, pero me pareció más original colocar esta de Previn por contrastar un poco.
¡Pues sí que estamos buenos tú yo con los duendes, querida Amalia! Tendremos que avisar a Iván Paixao, que de estas cosas sabe más que nadie (Un abrazo, Iván, y gracias por tus deseos de mejora de Federico). Me alegra saber que estás liada, madrina. Eso es una muy buena señal.
Bueno, Pau, lo del título no deja de ser una idea tomada de algunos especialistas en Gershwin. A mí me pareció original y convincente a más no poder. Efectivamente, la obra suena diferente bajo esa premisa, del todo acertada para mí.
Muitos beijinhos y abrazos, Frank, Amalia y Pau.
LEITER