Solamente el dibujo de tu forma
me araña hasta enloquecer
por las rutas del placer
que acaso cristalizan como norma
en el corpus del querer.
Caminas y desvío la mirada
ardorosa en voluntad;
resolviendo mi verdad
adivinas mi figura humillada
buscando tu realidad.
Me inspira tu delicia como sueño
en tinte de carmesí
nervioso en el frenesí
que tanto me da si grande o pequeño,
aperlado o en rubí.
Me apodero de tus vueltas furtivo
si en el frágil deambular
tus huellas he de tatuar
en mi alma encadenada de cautivo
que te implora acariciar.
De la colección ABISMO (mayo – noviembre 2006)
Me gusto esta dulce silva, querido Leiter. La encuentro meliflua, musical… enamorizcada: un divertimento de amante.
El dibujo que araña es una bella e interesante imagen. Ayer leía precisamente las siguientes frases que encuentro consonantes: «El amor consiste en imágenes que acosan al espíritu. Soy un hombre al que las imágenes atacan»… Eso del dibujo que rasguña y que encima se concreta por así decir en un corpus del deseo, me parece una acabada representación del sentimiento amoroso. Lo he disfrutado mucho, amigo mío…
Gran abrazo
Efectivamente, maestro Otto, esta breve bagatela es un divertimento creado casi de un tirón.
Cierta la frase pero cuando las imágenes atacan con mucha fuerza se puede producir un efecto más materialista que espiritual (cosa que tampoco es mala según las circunstancias…)
Un fraternal abrazo, maestro y amigo Otto
LEITER
Mis buenos amigos: estas palabras parecen pronunciadas por un moribundo Tristán, cuando herido mortalmente por la espada del pérfido Melot, evoca con dulzura y nostalgia a Isolda, la Mujer eterna y amada.
Sólo en sus brazos se encuentra la Paz.
Y es justamente ahora, cuando el destino decide que la Voz de Max Lorenz impregne los espacios en los que me encuentro, con el dulce decir que el Héroe enamorado dirige a su amantísima Isolda.