Si alguien no es capaz de conmoverse ante la belleza de la música, poesía e interpretación de Elisabeth Schwarzkopf de ESTE LIED de Richard Strauss, MORGEN, Op. 27 Nº4, decididamente no tiene sensibilidad.

 Si alguien no es capaz de imaginar un mundo ideal de felicidad escuchando esta breve pieza de apenas tres minutos, decididamente no tiene esperanza.

 Si alguien no es capaz de soñar con una persona amada paladeando las notas de esta inolvidable conjunción de música y poesía, decididamente no podrá nunca enamorarse.

 Si alguien no es capaz de anhelar una paz global en este mundo en el que vivimos ante la audición de esta pieza musical, decididamente carece de humanidad.

Disfrutadlo. Os dejo el texto del poeta John Henry Mackay y su traducción al español. La lectura y audición de la grabación os hará sentiros mejores personas en vuestro interior. Estoy seguro de ello.

Und morgen wird die Sonne wieder scheinen
und auf dem Wege, den ich gehen werde,
wird uns Glücklichen, sie wieder einen
inmitten dieser sonnenatmenden Erde…

Um zu dem Strand, dem weiten, wogenblauen,
werden will still und lagsam niedersteigen,
stumm werden wir uns in die Augen schauen,
und auf uns sinkt des Glückes stummes Schweigen…

—————————-

Y mañana el sol volverá a brillar;
y por el camino que yo recorreré,
nosotros nos reuniremos otra vez, los bienaventurados,
en el seno de esta tierra que respira la luz del sol.

Y a la inmensa playa, bañada por olas azules,
bajaremos despacio y silenciosamente,
calladamente nos miraremos a los ojos,
y sobre nosotros descenderá el mudo silencio de la felicidad.