El martes, en un telediario, mostraban la indignación de una asociación de pacientes (esquizofrénicos) ante el uso despectivo que un matutino (periódico El Mundo) hacía del término para referirse al accionar del gobierno de España.
Amén de solidarizarme con la reacción de este colectivo quienes, por no ser “sanos” sufren en demasía la estigmatización y el rechazo de los que nos creemos “perfectos”, llama mi atención la ligereza y desconocimiento con el que se usan las palabras y especialmente por aquellos quienes han hecho de la lengua del Quijote su medio de vida.
A cuento de lo anterior, en la última semana se encendieron las alarmas respecto a la supuesta fragilidad de nuestras cuentas públicas para afrontar el pago de nuestra deuda. Concurrieron a ello algunos hechos que por su simultaneidad exacerbaron el ánimo de todos, que como soy bueno, pienso que sin intención dañaron la imagen de un país gratuitamente (¿O no?)
Comenzó el periplo el Sr. Don Joaquín Almunia (comparando la situación de Grecia con la de España); luego declaraciones del expresidentes Aznar – cuando no – atacando al Presidente (su descaro para insultar no tiene fin) ;y como broche los artículos del Financial Times a quienes lo único que siempre les ha gustado de nuestro país son sus playas y el sol.
La consecuencia de todo ello fue un desplome de la bolsa española, el encarecimiento de los intereses que España debe pagar para contraer nueva deuda y la necesidad de parte del Gobierno de realizar un road–show por Londres y París para tranquilizar a los mercados y convencer que somos tan confiables como siempre .
A día jueves ya se sabe que el debilitamiento del Euro fue consecuencia de una toma de posiciones en corto (argot financiero) sobre divisas para lucrar con ello por parte de un grupo financiero de EEUU. El Financial Times ha modificado su punto de vista sobre la situación de nuestro país.
Esta acción podría decirse bastante común en este mundillo — recordemos que hace unos años afectó a la libra esterlina por parte del “ inversionista “ Soros — cuando no también a algún país de Latinoamérica; son prácticas legales siempre que no se haga uso de información privilegiada.
En el caso que nos ocupa bastaron solamente 6000 millones de euros para producir la corrida, lo que demuestra lo endeble de la economía mundial, pero el daño está hecho.
La situación ya se está corrigiendo, el Euro se recupera frente al Dólar y la bolsa española ha capeado el temporal.
En toda esta novela, tanto oposición como gobierno con su verborragia habitual hablaron de conspiraciones, enemigos especuladores y otros vocablos similares sin saber el significado de los mismos. Veamos un poco que dice la RAE al respecto.
Conspirar:
1. Dicho de varias personas: Unirse contra su superior o soberano.
2. Dicho de varias personas: Unirse contra un particular para hacerle daño.
3. Dicho de dos o más cosas: Concurrir a un mismo fin.
4. Convocar, llamar alguien en su favor.
De las acepciones podríamos tomar como adecuada la segunda salvo por el hecho que ni España o el Euro son “ particulares”. La tercera y cuarta no son aplicables
Especular.
a) Del latín. speculāris
1. Perteneciente o relativo a un espejo.
2. Semejante a un espejo.
3. Dicho de dos cosas simétricas: Que guardan la misma relación que la que tiene un objeto con su imagen en un espejo.
4. Dicho de una cosa: Reflejada en un espejo.
5. Transparente, diáfano.
b) Del latín speculāri.
1. Registrar, mirar con atención algo para reconocerlo y examinarlo.
2. Meditar, reflexionar con hondura, teorizar.
3. Perderse en sutilezas o hipótesis sin base real.
4. Efectuar operaciones comerciales o financieras, con la esperanza de obtener beneficios basados en las variaciones de los precios o de los cambios.
5. Comerciar, traficar.
6. Procurar provecho o ganancia fuera del tráfico mercantil.
El primer grupo de significados no aplica para el tema en cuestión.
En cuanto al segundo grupo, la acepción cuarta es la que más se adecua pero para desgracia de quienes intentaron con su utilización descalificar dicha acción no está reñida con la moral, la ética y mucho menos con la ley.
Se trata de una práctica que a diario realiza cualesquiera de nosotros, y hasta ellos, todos los días para proteger nuestros ingresos.
Alguien alguna vez dijo que nuestra lengua además de sus virtudes sonoras es tan enorme en vocablos (para desgracia de quienes tienen que aprenderla) que cada situación a describir tiene su correspondencia en una palabra, no pudiéndose dar lugar a equívocos lingüísticos .
Por favor “NO conspiremos ni especulemos con nuestra lengua”
Un abrazo y buen fin de semana
THENIGER
Theniger, a mí la especulación, a pequeña o gran escala, sí me parece inmoral, por muy legal que sea. Además, suele traer consecuencias, como por ejemplo la crisis financiera internacional que dio origen al actual estado de cosas.
Y la política económica del Gobierno, si no queremos calificarla de esquizofrénica para no ofender a ningún colectivo, tendremos que adjetivarla de errática, improvisada y a remolque de las circunstancias, pues es evidente que el Ejecutivo da siempre la sensación de ir por detrás de los acontecimientos, lo que tiene desorientado, perplejo y molesto al personal.
Entiendo lo que dices, pero también creo que debemos evitar caer en la dictadura de lo políticamente correcto y en el chantaje de la hipersusceptibilidad. Lo digo por el uso del término «esquizofrénico».
De seguir así no vamos a poder abrir la boca. Me parece claro que EL MUNDO no pretendía ofender a los esquizofrénicos sino criticar la falta de rumbo del Gobierno.
Un abrazo y buen finde.
gracias Angel por tu comentario, entiendo tu sentimiento. Mi comentario no pasa por lo políticamente correcto sino por usar palabras impropias para lo que quieren expresar. Tú lo has planteado claramente cuando calificas la conducta del gobierno sin cae en los errores que yo citaba. Respecto a la especulación como señalaba en mi post todos lo hacemos cuando esperamos las rebajas por ejemplo , y comparto contigo la inmoralidad de los que hacen de ello su forma de vida. Para el caso en cuestión por ejemplo en lugar de conspirar , debería decirse DESESTABILIZAR
UN ABRAZO