Nada quedará en los vientos,
 ni en bosques de tierras altas
ni en las cercas del arcén;
nadie observará que faltas
en la vid de los sarmientos…
Y tú partirás también.

Nada cubrirá las tierras,
 ni en los astros de los cielos
ni en los valles del edén;
nadie cubrirá con velos
las curvas de las esferas…
Y tú ascenderás también.

Sólo un abismo infinito
en la noche más oscura
que ni los ángeles ven;
sólo un silencio sin grito
en un vacío de locura…
Universo de vaivén

Sólo al ritmo de las olas,
sólo al ritmo del vaivén.

De la colección ABISMO (Mayo-noviembre 2006)